Más de setenta mil personas colmaban las tribunas. Algunos ya eran víctimas del horror, como el exfutbolista Claudio Morresi, que años después fue Secretario Nacional de Deportes durante el kirchnerismo. Su hermano Norberto, militante de 17 años de la Unión de Estudiantes Secundarios, estaba desaparecido desde 1976. Unos 1800 estudiantes secundarios hicieron coreografías bajo melodías militares.
La dictadura había decretado asueto. El periodista holandés eligió ir ese día a la Plaza de Mayo, ubicada a cuarenta cuadras del Monumental. Filmó a las Madres dando vueltas en círculo con pañuelos blancos en sus cabezas, desesperadas y pidiendo ayuda. Fueron las primeras imágenes que se conocieron en Europa sobre el drama.